Dividamos las formas de recibir energía sutil en dos categorías: los patrones ascendentes y descendentes.
El patrón ascendente de recibir energía sutil significa que la persona está en el estado de amor, en resonancia con la vibración del amor. Está lleno de la energía sutil de sus seres queridos y del campo exterior. Los momentos de verdadera felicidad, deleite, buenas obras y grandes logros lo nutren de energía. El patrón ascendente es el camino a Dios, el camino para impulsar la energía del amor. Resulta en crecimiento y progreso espiritual.
El patrón descendente significa recibir la energía de las personas generando emociones tales como ira, resentimiento, juicio y miedo. El mecanismo para recibir energía en este caso se describió anteriormente. El anhelo de obtener energía cada vez más sutil provoca un impulso incontrolable de cometer actos cada vez más horribles que son impactantes para las personas, especialmente para los más cercanos y queridos. Esta es una forma de degradación espiritual. Este patrón se llama descendente.
El patrón descendente consiste en redistribuir las cantidades disponibles de amor que las personas tienen actualmente. Es un regulador que evita que las personas acumulen demasiada energía sutil.
El patrón ascendente es difícil para las personas porque implica poder sentir amor puro al menos por momentos, estar en resonancia con la energía divina.
Pero la entrada de energía, en este caso, es tan poderosa, que basta para alimentar a muchas personas, que eligen el patrón descendente de intercambio de energía.
Tabla de contenido «Ley básica del intercambio de energía sutil»
Autor: Evgeny Kitanin (Vet Zatinus).